domingo, 4 de noviembre de 2007

Sueños

¿Hasta qué punto los sueños son involuntarios? ¿Hasta qué punto un sueño que estamos teniendo en un determinado momento, lo podemos llegar a controlar con nuestro propio pensamiento? ¿Realmente lo estamos modificando a nuestro antojo, es también pensamientos innatos que actúan sobre nuestro sueño?

Me ha pasado que esta noche he tenido un sueño, un sueño que además, parecía bastante real, y un sueño que se ha ido sucediendo a lo largo de la noche, como si de los capítulos de una teleserie se tratara: me despertaba pensando en lo que había soñado, pero al volver a dormirme volvía a continuar el sueño. Eso me ha llegado a pasar en algunas ocasiones, y llega un punto tal en el que no se sabe realmente qué es sueño, qué es pensamiento, o qué puede llegar a ser realidad simulada.

Sin embargo, en ciertos momentos del sueño, yo era capaz algo así como de razonar y no dejarme llevar por la historia del sueño, y de esta manera, modificar mi propia conducta dentro de la escena para poder cambiar acontecimientos. La pregunta era la que me hacía: ¿realmente esos pensamientos eran razonados por mi yo real, o era una proyección de mi razonamiento de mi yo dentro del sueño? Esto lo considero importante, puesto que si de alguna manera uno mismo pudiera controlar lo que sueña y controlar el desenlace de determinados sueños, de alguna forma podría acabar con posibles pesadillas, miedos o fobias que se reflejan con nocturnidad y alevosía en forma de sueños. Haciendo algunas pruebas a lo largo de mi vida, pero siempre sin prever, creo que en cierta manera se pueden modificar el desenlace de ciertos sueños. Así habría sueños que podríamos convertir en dulces sueños, o las pesadillas darles un tono menos oscuro, que sería bastante que agradecer.
Otro tema, dentro de estos sueños modificables, es cuando soñamos en semiconsciencia: en parte parece que estamos despiertos, pero ligeramente inmóviles aún, y el sueño pasa por nuestra mente, semitransparente, como si de ideas normales se tratasen. Este tipo de sueños son aún más manejables, por la propia consciencia y por la profundidad del sueño en cuestión: cuanto más profundo es un sueño, tanto más difícil será alterar su desenlace.

Igualmente no todas las noches se sueña con la misma intensidad. Noches que se pasan prácticamente en blanco, y otras, como esta última que he vivido, en la que me pasaba soñando toda la noche. No existe en principio una relación de actividad mental durante el día con su reflejo nocturno. Como tampoco se sabe aún con total seguridad el porqué se sueña. Se sabe porqué se duerme, pero no el significado de soñar y del contenido de los mismos: ¿Por qué soñamos algunas veces con personas que llevamos sin saber de ellas años? Es más, ¿porqué después de ese sueño, volvemos a ver a esa persona después de tanto tiempo? ¿existe alguna relación?

¿Los sueños son reflejo de nuestra vida, o nuestra vida puede ser en parte reflejo de nuestros sueños?

Hasta qué punto deseas que un sueño sea una realidad, o una realidad un mero sueño…

martes, 23 de octubre de 2007

Metamorfosis

La metamorfosis es un cambio en la vida de algunos animales, como por ejemplo, los anfibios (también se presenta en muchos artrópodos, etc..). Es un cambio profundo, una transformación. Sin embargo, hoy no estoy aqui para hablaros de las teorias biolocas de otras ocasiones.

Hoy vengo a contaros un poco sobre el animal que es capaz de sufrir más metamorfosis a pesar de ser un mamífero. Me refiero al hombre.

Ese animal que es capaz de transformarse cuando se levanta en días nublados.

Ese mismo animal que altera totalmente su ser cuando discute por teléfono, o charla por internet.

Ese mismo animal que se transforma en un ser totalmente despreciable, egoista y descortés cuando se sube a un coche.

Es por esta última razón principalmente por la que estoy escribiendo aqui. ¿Por qué las personas cambiamos tanto (aunque no todos, si la gran mayoría), cuando tenemos un volante en nuestras manos? No cedemos el paso, atosigamos a peatones motoristas u otros conductores que quieren ir más tranquilos. Mostramos toda nuestra ira en algunas ocasiones, escudándonos dentro de esa armadura de acero que nos envuelve. Nos creemos invulnerables, superhéroes, que nada puede con nosotros, y avasallamos a todo bicho viviente que ose cruzarse en nuestro camino ¿Por qué? ¿Por qué un volante es capaz de transformar a una apacible señora de 50 tantos capaz de meter el miedo a un joven corpulento por su velocidad de aproximación a un paso de peatones? ¿Qué ocurre para que una pacífica persona saque la cabeza por la ventanilla escupiendo insultos que sería incapaz de ni siquiera pensar si fuera caminando por la acera?

Se me viene a la memoria el anuncio que la DGT no hace mucho anda poniendo ¿Por qué te pegas al de delante? (intenté buscar el video del anuncio... pero no lo encuentro :( )

En definitiva, hoy para salir del trabajo, casi me tiro en la salida 10 minutos con el coche "asomado" para ver si podía incorporarme. Lejos de facilitar la maniobra algunos, aceleran, la entorpecen o la evitan en la medida de lo posible ¿Por qué? no lo se... Para mi perder un "puesto" en una larga cola de coches, es decir, 4 metros y medio, me supone poco... me supone que llegaré a mi destino dos segundos más tarde, no sé dónde está el problema. En fin... pero esto no es el calentón de un dia, no, esto me viene pasando día si, dia no.

Qué educados somos abriendo puertas, y que egoístas somos con un volante en nuestras manos...

Saludos

viernes, 28 de septiembre de 2007

Altruismo

Gracias a todos los que se han preocupado de que no escribiera por aquí, y más aún, que esperaran nuevos escritos. Mil gracias a todos vosotros, los incondicionales, son los que animan a que siga escribiendo.

En primer lugar, explicar el porqué llevo casi un mes sin escribir nada en el blog. Varias razones hay para ellos, pereza, falta de ganas y falta de temas. Lo siento, soy una persona que a veces, y solo a veces, le gusta imprimir ciertos cambios voluntarios a su vida y sacar y meter cosas a costa de no ser tan monótona. No es que leer y escribir blogs se estuviera convirtiendo ya en algo monótono, nada más lejos de la realidad, pero si estaba viendo como sistemáticamente cada vez que encendía el ordenador, lo conectaba a Internet, abría el explorador, mis enlaces favoritos y abría del tirón y de primeras todas las páginas y blogs que solía leer todos los días. Tampoco quiero decir con esto que me haya cansado de leeros o transmitiros mis pensamientos, solo que pensé que sería bueno tomar un pequeño paréntesis en ese sentido.

Y el resultado, creo, pienso, que es una mentalidad algo más reforzada y en óptimas condiciones de volver a transmitir reflexiones personales, o a comprender las que leo. Además, después de haber comprobado en los últimos días que los últimos 7 años de mi vida no fueron en balde y que pueden dar mucho de sí, me gustaría abrir una nueva vía de impresiones, tratadas desde el punto de vista biológico, desde mi más modesta visión propia. Ahí va la primera.

De lo que os quiero leer hoy fue un tema que una gran amiga (gracias AnkSuRa) me hizo reflexionar este lunes pasado… y ya estamos a viernes.

Su afirmación categórica me dejó poco más que impresionado e incapaz de rebartirle: “el altruismo auténtico no existe, porque cada acción que hacemos tiene un fin; al igual que la solidaridad”. Y me dejó incapaz de rebatirle por el simple hecho de que en ese instante mi cabeza quedó inundada de muchas situaciones que a priori corroboraban esa idea. Y desde luego, si nos vamos a RAE y buscamos el significado de la palabra “solidaridad” nos daremos cuenta que es: Modo de derecho u obligación in sólidum. Derecho u obligación… ¿obligación moral a ser solidario? ¿por eso ayudamos a los demás? ¿porque contraemos una obligación moral en hacerlo?. Puede ser, y ahí te daré la razón. En ese caso, mejor que referirnos a solidaridad, una palabra muy bonita, podríamos hacerlo con “Moralidad”.

El significado de “Altruismo” no es tan clarificador: Diligencia en procurar el bien ajeno aun a costa del propio.
Desde el punto de vista sociológico y psicológico, se contempla que el altruismo real no existe como tal, porque es eso, por cada acción que llevamos a cabo, la hacemos con un fin, en este caso positivo: reconocimiento, satisfacción personal, realización, moral, ética, de conciencia… En teoría, el altruismo verdadero se considera a aquel que dicha acción altruista no reporta ningún fin.

Sin embargo, sigo manteniendo que el altruismo desde el punto de vista biológico existe. Solo que su existencia es tan sumamente baja, que apenas podemos contemplar en la vida real. Pero no me estaría refiriendo al altruismo de un padre por proteger a su hijo a costa de si mismo (salvaguardar la descendencia, es decir, la estirpe genética). Incluso no me valdría el ejemplo de un miembro que salva al otro miembro de su pareja en su propio perjuicio (salvar un cuidador parental para su descendencia). O la de un guardaespaldas que sirve de escudo humano a su protegido (simplemente es su trabajo y cobra por ello). No, a lo que me refiero son a acciones innatas, totalmente involuntarias, que aun entrañando un riesgo potencialmente muy alto, la lleva a cabo, para “salvar” a un semejante. De hecho, este tipo de conductas, cuando se les pregunta a su actor el por qué lo hizo, la respuesta suele ser la misma: “No lo se, me vino solo. Si lo hubiese pensado, no lo habría hecho”. Señores, eso si es el altruismo verdadero, y existe, solo que en muy baja proporción, por lo que no lo idealicemos.

Se dice en Biología que el altruismo es una conducta que va en contra de la propia selección natural del individuo en el sentido de que un individuo altruista se expondrá aún a costa de él mismo para salvar a un semejante. Y esta sobre exposición al medio puede provocar su temprana eliminación, junto con ese supuesto “gen altruista”. Es decir, para entendernos, este gen va en contra de la propia supervivencia del individuo, como si de una mutación degenerativa se tratara, haciéndolo más vulnerable a su desaparición. Por ello que el hipotético gen altruista no esté más extendido.
Biológicamente explicable solo existe el altruísmo de especie, por el cual se dice que un individuo estaría dispuesto a sacrificar su vida (es decir, sus propios genes) si ese coste fuese inferior a un hipotético coste potencial de genes semejantes a los suyos. Es decir un individuo que tiene ciertos genes, los cuales comparte un 50% con cada hermano, estaría dispuesto a dar su propia vida a cambio de salvar la de tres hermanos suyos (150% de genes), o de 5 sobrinos, con los que comparte un 25% (125% de genes), o de 9 primos con los que comparte un 12,5% de sus propios genes (112,5% de sus genes). Esto en Biología se le conoce como la "Ley de Hamilton".


Entonces, ¿es que es malo ayudar a los demás por temor a que piensen que lo haces por un fin?. O ¿es malo que la gente te ayude por que pienses que detrás hay un fin?. Pues no, no hay nada de malo, siempre y cuando ese fin, como ya se intuirá, sea positivo. Lo que sí debemos es ser cautos y dirimir entre las acciones altruistas o moralistas que sean con fines positivos o inocuos, de las que tengan fines negativos o perjudiciales a terceros.

Ayuda por el simple hecho de que salga de ti y sin esperar nada a cambio, pues la satisfacción será doble.
No idealices las manos amigas que te tienden, pues un día cuando quieras agarrarte puede que no estén ahí y la frustración te invada.

Saludos.

miércoles, 5 de septiembre de 2007

Por varios dias...

Tan importante y tan normal es expresar las preocupaciones como las alegrías.

Por varios días creí perder el norte. Por varios días creí ser más débil de lo que soy. Por varios días mi cabeza estuvo muy agitada. Y en esos días pude contar con la inestimable ayuda, a veces de urgencia, de dos personas, que me hicieron ver las cosas con otro cristal, arrojar algo de luz. Cuando uno está muy habituado a contrastar opiniones, a buscar siempre una segunda, tercera, etc opinión, resulta vital contar con esas palabras profundas, sinceras, y que sirvan para hacerte ver las cosas de otra manera (o al menos de hacértelas ver...), de no caer en la temida subjetividad o parcialidad. Sabéis quienes sois, y con eso es suficiente. No sabéis cuan afortunado me siento.

Y si, hoy puedo decir que después de varios días, el sol parece que asoma, parece que los espesos y oscuros nubarrones se despejaron gracias a un huracán imprevisto, que desencadenó todos los acontecimientos, y que hizo que hoy, de nuevo, vuelva a salir el sol.


Cuando siempre son acciones los que hacen desencadenar los acontecimientos de manera imprevista...

martes, 4 de septiembre de 2007

La bifurcación

Normalmente, para una persona metódica y racional como suele ser mi carácter, gusta de llevar alineados, parejos, razón y corazón; que actúen sinérgicamente.

El problema viene cuando por circunstancias de la vida, estas dos se desacoplan, se desincronizan. Es como el baile en el que la pareja se descoordina y se pisan o empujan. Al final terminan por tomar dos caminos distintos y sin saber muy bien cual tomar.

El corazon, siempre fresco, más imprevisible, y por ello, con más margen de reacción.
La razón, predecible, más sosegada, en donde siempre 2+2 serán 4...

¿Y si tirara campo a través? pero.. por dónde?

domingo, 2 de septiembre de 2007

25.... va por vosotros!

Hace hoy justamente 25 años empezó mi reloj a contar las horas...

Han sido 25 años llenos de muchas vivencias, de muchas cosas, muchas personas en mi vida...

Quiero agradecer enormemente a esas personas que hoy, a lo largo de estas 24 horas se acordaron de que yo hoy cumplía años y me felicitaron. Que sepáis que con cada Felicidades! leído, dejé escapar una de mis mejores sonrisas. Sabéis la ilusión que me hace que me digáis esa palabra mágica, para mí, el mejor regalo.

No os he podido corresponder con una buena fiesta, como habría sido lo ideal, pero bueno, valga este pequeño escrito para que sepáis lo feliz que me habéis hecho sentir hoy. Gracias!

Nunca una palabra tuvo tanto significado en un momento determinado

viernes, 31 de agosto de 2007

Balance anual

31 de agosto. Los dos principales meses de verano han volado, y nunca mejor dicho. Nunca se me había pasado tan rápido el tiempo como se me está pasando este fugaz 2007... y todo ello sin llegar a hacer una gran cantidad de cosas (siempre se pueden hacer muchas mas...).

Si nos remontamos hace un año, me encontraba estudiando un par de asignaturas para septiembre mientras alternaba con una beca bastante apañada que tenía para el verano. Cuando justamente acabé de hacer el último examen, una llamada telefónica me sorprendió: yo sería la persona que organizaría las Jornadas de Recepción de la Universidad ese año. La verdad es que no me lo creía. La tarea se prolongó hasta casi la navidad, en la que viví experiencias inolvidables, trabajé en equipo, saqué el relaciones públicas que tan en secreto guardo, y disfrute como un auténtico niño durante los dos días que duró aquello. Tanto trabajo que había costado, y daba pena darlo por finalizado. Conjuntamente tuve que sincronizarlo con las clases y prácticas del que sería mi último año académico, con mi beca anual como informador, y con la organización de dos cursos casi seguidos. Cuando me quise dar cuenta, fue navidad. Una navidad bastante atípica, la verdad... como las de hace un par de años para acá... Pero con un momento bastante especial que recordare por mucho tiempo.
De nuevo cuando abrí los ojos, eran plenos exámenes. Y ahí estaba yo, llendome solo todas las mañanas a la otra punta de la ciudad, a refugiarme entre libros todo el día, hasta el anochecer del invierno. Y despues continuamos con más cursillos, y con unos viajecitos, que también los recordaré como momentos muy especiales, y con la mayor de las alegrías al pensar en que no serán los únicos.
Y llegó la semana santa, igualmente atípica, puesto que estuve... (¿cómo sería la palabra... exclavizado?) por un trabajo que resultó ser el más tedioso de la carrera, y en el que puse el resto, con la satisfacción de obtener un buen resultado.
Y de nuevo exámenes, con sus altibajos anímicos, con sus momentos de moral y de cansancio, pero igualmente dando lo máximo, e incluso (y conste que odio estudiar con todas mis fuerzas...) saboreando esos momentos. ¿Por qué? porque a pesar de no ser de total agrado, serían los ultimos; tocaba cerrar etapa, y las etapas me gusta cerrarlas con una sonrisa, con la mejor de las sonrisas. Y creo que lo conseguí: tengo un título, estoy de prácticas en un ambiente de trabajo envidiable, con unos compañeros que todos desearíamos.

Y por supuesto, a lo largo del año, conociendo a mucha gente, con algunos congeniando más y otros menos, pero igualmente intentando conocer lo mejor posible a la gente que me rodea: charlas, cafés, largas conversaciones transcendentales, mudanzas, interminables horas de viaje o conversaciones cibernéticas. Y sin haber "juergueado" mucho, no me considero en ese aspecto como insatisfecho, porque este año, más que nunca he procurado hacer lo que realmente me apetecía en cada momento. Y puedo decir que en todo este año me he sentido feliz.

Y es asi como llegamos a día de hoy, despues de un año, con sus 365 días, en los que el tiempo nunca fue tan relativo. Ojala los años venideros sean lo más parecido a este.

¿Y por qué os cuento todo esto? Anoche me dí cuenta que era el momento, el momento de recordar y hacer balance de mis últimos instantes como estudiante, intensos... saboreando cada momento; de ser consciente que estos momentos seguramente no se volverán a repetir...

Si niña, al final echaré esto mucho de menos.

miércoles, 29 de agosto de 2007

Vacío silencioso

Los instantes previos a un cambio en tu vida se manifiestan por un pequeño lapso de vacío. Ese vacío eterno que transcurre a cámara lenta, manifestándose burlón ante nosotros, precediendo a acontecimientos de índole variada.

Hoy tengo esa sensación, siento ese silencioso vacío que augura un cambio de dirección, esa nada que parece envolverte y que no te deja pensar. Hasta qué punto será verdad? es decir... ¿seguramente me esperan cambios, o me levanté hoy así? No, porque ya ayer por la tarde empecé a sentir esa sensación. No puedo evitar preguntarme cuales serán los cambios que me aguardan, hasta qué punto serán importantes en mi vida.

Hasta entonces no me queda otra que esperar, en silencio, aguardando acontecimientos y analizando lo que vaya viniendo. No me preocupa, estoy preparado.

No sé porqué se me vino a la mente pensando en todo esto, esta canción, que me gustaría compartir:

Delerium - Silence


Give me release
Witness me
I am outside
Give me peace
Heaven holds a sense of wonder
And I wanted to believe
That I'd get caught up
When the rage in me subsides
Passion choke the flower
'Til she cries no more
Possessing all the beauty
Hungry still for more
Heaven holds a sense of wonder
And I wanted to believe
that I'd get caught up when the rage in me subside
In this white wave I am sinking in this silence
In this white wave in this silence I believe
I can't help this longing
Comfort me
I can't hold it all in
If you won't let me
Heaven holds a sense of wonder
And I wanted to believe
that I'd get caught up when the rage in me subside
In this white wave
I am sinking in this silence
In this white wave
in this silence I believe
I have seen you in this white wave you are silent
You are breathing in this white wave
I am free

Como siempre, sin traducir, que si no pierde el encanto.


Aunque la razón y el corazón sean en muchas ocasiones antagonistas, la acción conjunta de ambos es la que nos hace estar vivos. En ausencia de uno, dejariamos de estarlo.

domingo, 26 de agosto de 2007

Punto de inflexión

Este largo verano me ha hecho pensar y meditar sobre muchas cosas. La mente, liberada de la pesada carga que supone estudiar a alto nivel, la deja libre para otros menesteres, muchos de ellos constructivos.

Empecé el verano terminando una etapa y celebrándolo apenas, por diversas circunstancias. Pasé sin ningún respiro de la vida académica a la laboral, sin tiempo a pensar sobre ello. Y la verdad es que los cambios repentinos suelen ser a veces los menos agónicos. Pero antes o después llega el momento en el que reflexionamos sobre el cambio, y te das cuenta que el cambio no representa una única consecuencia, ya que afecta a los principales niveles sobre los que sustentas tu vida, y atendiendo a la nueva circunstancia actuar a tal efecto. Es por ello que quizás este cambio se deba traducir en una manera distinta de actuar diversas situaciones: ahora me veo con más afán de enfrentamiento, más analista, medito más, pienso aún más lo que hago, y ya lo que me molesta, por pequeño que sea, no contemplo callarme. ¿Por qué antes lo hacia? simple parsimonia: soy una persona a la que los enfrentamientos con otras personas lo merman mucho psíquicamente, y esto se traducía en un bajo rendimiento académico, que muchas veces he visto reflejado. Por ello en los ultimos años tomé la determinación de tener una extrema mano izquierda y evitar cualquier roce en la medida de lo posible. Ahora no los evito, simplemente pienso que no me tengo que apartar de mi camino.

Y es por ello que me encuentro en este punto de inflexión, en el vértice entre dos pendientes del sendero de mi vida, y ese cambio de pendiente obliga un cambio de marcha, y es lo que quiero imprimir. Empiezo a mostrar las cartas, a jugar las mejores manos, porque es el momento y el lugar, y me veo con fuerzas para ello.

El equilibrio es inestable y nos puede hacer cambiar repentinamente. Terrible ironía.

Saludos

jueves, 23 de agosto de 2007

Centrifugado

Las cosas que nos hacen pensar y reflexionar... agitación mental, confusion, sin ideas claras... sueño que no aparece, dudas que surgen. ¿Por qué el verano me suele hacer pensar tanto?

¿Hasta qué punto uno puede tirar del carro? ¿Hasta qué punto ser consejero, el eje central? ¿Cuándo es el momento de poner las cartas bocarriba?

¿Por qué me cuestiono esto?

Mejor dormiré. Podría contar mis teorías del sueño... pero eso sería otro tema, y hoy no apetece, mañana mejor.

Buenas noches.

La alegría solo es felicidad cuando es compartida

jueves, 9 de agosto de 2007

Rarezas

No puedo evitar una sonrisa curiosa cada vez que veo el anuncio de cierta marca de pan de molde. En el spot, literalmente se califica como indescriptible la sensación que produce el comer un pan de molde con la corteza totalmente blanca, como si fuera miga.
Otra marca anuncia otro pan de molde al que directamente le quitan la corteza.
Y yo me pregunto ¿por qué esa cruzada contra la corteza? Quizás a ojos de la mayoría vean esta pregunta como una completa banalidad. Pero para mí no lo es, cuando es la corteza la parte del pan de molde que precisamente más me gusta, por su sabor, por su color, por su aspecto. Todo ello lo hace para mí la parte más deseable de ese alimento, y a la vez, la parte más desagradable para la mayoría de la gente.

Por ejemplo, yo los periódicos los empiezo por detrás. Eso, que por ejemplo puede ser más o menos común en la mayoría de las personas, deja de serlo cuando en vez de un periódico, hablamos de un libro de lectura. No se porqué tengo un irremediable impulso cuando estoy leyendo un libro, de irme a las últimas páginas, al último capítulo, y leerlo someramente.

Por otra parte, los psicólogos demuestran lo previsible que puede ser la mente humana y su ordenación de la información. El ejemplo más típico es: piensa en una herramienta y en un color. La mayoría de las personas habrán pensado en un martillo rojo. Yo, sin embargo, cuando a mí me hicieron el test por primera vez, pensé en un destornillador amarillo; como el 2% que no piensa en el martillo rojo.

Y así podría pasarme horas, pero no es plan de aburrir mucho, solo pretendo poner un ejemplo descriptivo. Mi objetivo en esta reflexión es analizar hasta qué punto soy raro. Hasta qué punto soy diferente, no soy como la mayoría. Raro… otra palabra que me suena tabú. Solemos llamar raro a algo que no es normal, y por ello no es lo que debería ser. Sin embargo, no tiene porqué ser así, hay muchas cosas en las que no se sigue el camino normal y son igualmente válidas. Ahí es donde radica la grandeza de la mente del ser humano. Puede pensar y razonar de forma indepiendiente.

Sin embargo, a veces ver que tu propio comportamiento se sale de la regla, o del camino por el que optan ma mayoría, puede producir cierta incertidumbre, lo que puede conllevar a una inseguridad manifiesta. Esto se produce por no poder comparar, no tener referencias. El ser humano tiende a basarse en patrones que utiliza de forma continua en su vida cotidiana. Estos patrones son los que nos hacen dirimir entre lo que está bien y lo que está mal en muchas ocasiones.

Pienso que sería muy aburrido tener una vida basada en patrones ya prefijados. Esto significaría que cada acto, cada pensamiento, cada cosa que hacemos, anteriormente también se llevó a cabo y se analizó.

Investigar por caminos aún no explorados nos darán esa incertidumbre muchas veces necesaria en nuestras vidas

lunes, 6 de agosto de 2007

El ultimo año

No ando ultimamente con mucha inspiracion para la escritura... creo que el verano está causando estragos en mi ser, y a muchos niveles.

Por eso, hoy me decanto más por contar un poco cómo fueron los acontecimientos, a rasgos muy generales, de lo que me ha tocado vivir en el último año. Y es que, tras 7 años (si, 7 xD), conseguí terminar mi carrerita, cumplir el objetivo marcado hace ya unos cuantos años, cuando apenas si rondaba la mayoría de edad. 7 años, todos ellos diferentes en contenido y muchas veces en compañía, en los que he vivido, he madurado, he hecho muchas cosas impensables y otras no tanto...Si que ha llovido desde entonces... y ha llovido sobre seco, sobre mojado, y sobre encharcado. Pero llovía, que era lo importante, en mejores o peores momentos pero llovía, y al final esa lluvia es la que puedes recoger en un recipiente y decir "buah!, por todo esto he pasado?" Pues si... por eso y por más que te tocará.

A sabiendas que era el ultimo paso para completar un ciclo, intenté disfrutarlo, vivirlo de una manera especial. Este año en vez de ponerme el chubasquero o sacar el paraguas por temor a mojarme demasiado xD, miré al cielo, extendí los brazos y dejé que la lluvia me impregnase. Y al final qué es lo que queda? Muchas gotitas, cada una especial, cada una con su esencia, cada una con su gracia al caer y mojarme. A lo que vengo a decir, es que hay veces que es necesario mojarse, para captar la esencia y el momento de algo, y tener esos recuerdos (verdad?) que nos hacen estar vivos.... Por eso, dejad los paraguas en casa de vez en cuando, y sentir la lluvia caer.

Y esque no recordaba desde hace mucho tiempo un año tan lluvioso

miércoles, 1 de agosto de 2007

Mentira, franqueza y ética... duro dilema

La mentira piadosa, aquella que una persona puede lanzar en algunas ocasiones, según los lances.

¿Hasta qué punto son éticas? ¿Son necesarias? ¿Facilitan nuestra vida y la vida de nuestro entorno?.

Son preguntas que me vienen a la mente. Siempre están las dos vertientes:

- Las personas francas, que van de frente, que dicen todo tal cual lo piensan. Si, son espontáneos, auténticos... ¿pero no pecan de cierta brusquedad en algunas ocasiones?

- Por contra tenemos al mentiroso compulsivo. A aquel que puede pasarse de servicial, de querer quedar bien, de no ser autor de cejas levantadas. Si, son personas muy sociables, predecibles... amigos fáciles... ¿pero no pecan aún más que los anteriores de ser en ocasiones demasiado complacientes, aduladores?.

Como siempre en todos estos casos, existe el status de equilibrio. Pienso que tan bueno es ser franc@ en algunas ocasiones, de tener cierta espontaneidad...; como de en otras ocasiones guardar las formas para no herir sentimientos o provocar trifulcas innecesarias.
Este punto de equilibrio lo marcamos cada uno, a través de nuestra propia ética.

Es por ello lo que planteo: ¿hasta qué punto es ético mentir en algunas ocasiones? (cielos... la palabra mentira me suena a tabú... ¿os pasa también a vosotros?). ¿Hasta qué punto es bueno, es aceptable, es recomendable, ser un poco comedido en tus palabras, en la reflexión de tus actos en ciertas ocasiones? O planteado desde el otro punto de vista: ¿hasta qué punto es aceptable ser franco, directo con tus semejantes, sin llegar a herir innecesariamente a los que te rodean?.

¿El punto siempre es fijo, o puede variar? Son dudas que asaltan a mi cabeza... Opinad los que creáis conveniente... y para ellos, gracias, por leerlo y por contestar.

Saludos.

viernes, 27 de julio de 2007

La fiebre

Si, la fiebre, y no del sábado noche, si no de los blog's, jeje.

Luz verde a este, que será el primer blog público que poseo.

Saludos!