Y no hay dos sin tres...

Y curiosamente me preguntaron no hace poco "¿y para cuando una tercera entrega?" "pues espero que pronto" y curiosamente al cabo de menos de una semana me rescataban por segunda vez para continuar con la labor que ya en su día me encargaron. Y es que llevo de nuevo una semana trabajando en el mismo sitio de siempre, vuelvo a la misma empresa, en esta tercera entrega.

Y volví en el momento que menos esperaba, que menos esperanzas podía tener. Pero parece que la vida me vuelve a sonreir de nuevo y puedo disfrutar de otra temporada trabajando, que en estos tiempos que corren parece casi un privilegio. Seguir aprendiendo y seguir desempeñando un trabajo para lo que no estudie, pero que me entusiasma.

Me entusiasma tanto como el blog de motor que tengo: http://thebrickyard.wordpress.com/ y que cumple ya un mes de vida, y en ese mes de vida hemos tenido casi 5000 visitas, una cifra muy buena para la juventud de la página. Algo que nos anima más a seguir adelante con el proyecto.

Y me entusiasmo también de pensar y mirar hacia delante, de darme cuenta de algunas cosas, y de contemplar algunas cosas que antes no lo hacía. Hace un mes y algo lo decía: andaba madurando a marchas forzadas, y así es. Salir de la facultad y enfrentarme al mundo real es un reto obligado e importante, y que va curtiendo con el paso de los días. En este último año he aprendido muchas cosas, las cuales no vienen en los libros, y que al fin y al cabo son las que te hacen sacarle rendimiento a esta vida que nos ha tocado.

Solo el ensayo y entrenamiento te hara casi perfecto...